Escuchando estos últimos días - y casi desde la misma noche electoral del pasado mes de mayo - las noticias, comentarios y artículos de opinión, sobre los resultados en la Comunidad Autónoma de Extremadura, me ha resultado muy difícil tratar entender el significado de la palabra abstención. Parece ser que para muchos no es una opción legítima. Convendrán conmigo- quienes así piensan- que a partir de ahora en las próximas convocatorias electorales, el partido que ostenta el poder con mayoría - simple o absoluta- será el partido de los abstencionistas.
Han corrido rios de tinta y el poder llamado mediático y ciertos sectores políticos, se ha lanzado sin frenos sobre el Partido Izquierda Unida. Trás 28 años de gobierno socialista en la región- que se dice pronto- el PSOE pierde casi setenta mil votos obteniendo 30 escaños, siendo superado por el PP que obtiene 32 escaños. Y bueno.... Izquierda Unida entra de nuevo en el Parlamento Autónomo con 3 escaños. Los votos que sustentan esos tres escaños, se supone que son de electores que en cualquier caso no se lo quisieron dar al PSOE ni al PP.
Por qué pensar que esos votos de IU, son en última instancia votos del PSOE? Es que acaso los que votaron a IU fue por error? Bien sabían esos votantes de IU, que nunca serían la fuerza mas votada y que muy probablemente PSOE y PP andaban muy equilibrados, el primero bajando en votos y el segundo subiendo.
El PSOE, esperaba- ¡Cómo no!- que esos 3 escaños le hubiesen servido para seguir otros cuatro años gobernado la región, en espera de mejores tiempos para volver a su mayoría absoluta y mantenerse así, de por vida, en el poder absoluto. Es así de este modo, como el PSOE considera que IU no debe ser un partido con luz propia- como deben serlo todos- sino que su misión radica exclusivamente en servir de cerilla que alumbre en el caso de un apagón de luz y una vez recobrado el servicio, apagar la cerilla y guardar la caja hasta una próxima ocasión, esperando que ésta no llegue nunca.
Dijo Fernández Vara: los extremeños han votado mayoritariamente izquierdas (33 frente a 32). Se le olvidaba al expresidente que para el PSOE, nunca, nunca, IU significó nada. Ni durante su mandato ni durante los 24 años anteriores. Sólo desde cada Comunidad o cada municipio se pueden entender, a veces, los resultados electorales. La prepotencia, el ninguneo y la arrogancia manifestada contra IU, dió lugar a que las distintas asambleas locales, se manifestaran por mayoría en contra de un pacto PSOE-IU.
El PSOE, como fuerza de izquierdas , ha despreciado desde el comienzo de la transición , a un partido al que cuando le ha interesado- y sólamente entonces- , le ha solicitado su apoyo en beneficio exclusivamente propio. Como ejemplo de ese desprecio está como ejemplo una Ley Electoral ( auténtica pinza PSOE-PP) que a estas alturas, y trás treinta y tres años, permite que un partido como IU con millón y medio de votos en las últimas generales, mantenga una representación irrisoria en beneficio de los dos grandes. Como recordó Llamazares desde la tribuna del Congreso en el último debate, es la tercera fuerza en votos de la cámara y, sin embargo, su turno de palabras es el sexto dentro de un grupo mixto con apenas 10 minutos de turno de palabra para cada uno, y habiendo visto durante años, cómo cuando llega el turno de palabras de este grupo, los escaños se van vaciando, hasta que llegue de nuevo lo importante.
Parece ser que el PSOE, si tiene el derecho de pernada para pactar con el PP quitándole la opción de gobierno a IU ( se podrían poner cantidad de ejemplos a lo largo de la geografía nacional y nadie se rasga las vestiduras) o para pactar con quien más le interese en cada momento sin que tenga que dar la mínima explicación.
IU se podía haber votado a si misma, pero el reglamento de la cámara extremeña se lo prohíbe. Podía haber votado al PSOE y no ha querido al no sentirse identificada con un partido que tampoco se siente identificado con ella. Podía haber votado al PP. No lo ha hecho.
Se ha abstenido , y es su derecho. Se está olvidando de forma intencionada desde algunos sectores que la abstención de IU no ha favorecido a ninguno de los dos partidos en liza. Simplemente ha dejado que gobierne al más votado.
Quien le ha dado el poder al PP, han sido los votos obtenidos, resultando ser la primera fuerza minoritaria. Y quien se lo ha quitado al PSOE han sido también los votos, al haber perdido casi setenta mil votos. Esa es la realidad y no otra. El principio: si no estás conmigo, estás contra mí, suena poco democrático.
Todo lo demás es manipulación y enredos. Por cierto, ¿ con quién pacta el PSOE en el congreso de los diputados para sacar adelante sus proyectos ?. Claro que con un partido de tres diputados, para qué pactar?. Aunque tenga millón y medio de votos.
Ahora es el momento de gobernar desde la oposición, o no?. Aunque Fernández Vara ya haya manifestado que. " No voy a aceptar bajo ningún concepto que si el PSOE no ha servido a IU para gobernar Extremadura, ahora no le va a servir para hacer oposición conjunta". Sin comentarios.
Es curioso, que tres diputados que se mantienen fieles a sus votantes, y dispuestos a defender desde su óptica y su posición las propuestas que se debatan en la cámara, frente a un PP en minoría , estén ahora con la sombra de un expediente sobre sus cabezas. Con la de cambalaches vividos a lo largo de tantos años y de todos los colores.