( En homenaje y recuerdo a tantas personas que apostaron y continúan apostando desde su fe viva, tan alejada de la Iglesia oficial, por un mundo más justo, más humano y más solidario)
* La otra cara de la moneda
En la historia de la Iglesia no todo han sido negros nubarrones aunque haya sido el color predominante a lo largo de siglos. En sus luchas internas siempre han prevalecido, al final, las corrientes más reaccionarias enfrentadas a la Razón , a la Ciencia y al Hombre. Corrientes reaccionarias, apegadas por otra parte al poder, identificado generalmente, a ideologías conservadoras o extremadamente conservadoras.
Pero también en su historia ha habido destellos, fugaces en la mayoría de ocasiones, sobre otra manera de entender, y vivir, las enseñanzas evangélicas, con las manos siempre abiertas a corrientes agnósticas y/o ateas, unidas por la radicalidad sobre cómo el deseado paraíso debe comenzar aquí en la tierra y no en el más allá. Es así, como el terremoto que supuso el Concilio Vaticano II dentro de la Iglesia Católica( 1962-1965), convocado por el Papa Juan XXIII, abrió paso entre otras cuestioones al movimiento surgido en latinoamérica, conocido como Teología de la Liberación. Entre sus fundadores destacan Gustavo Gutiérrez Merino (Perú), Dominico y Principe de Asturias en Humanidades (2003), Leonardo Boff (Brasil, 1938), Franciscano, Teólogo, Filósofo y escritor. Sometido a procesos eclesiásticos en 1982 y 1995 y posteriormente condenado, abandonando más tarde el sacerdocio. Camilo Torres ( Colombia), fallecido en 1966. Óscar Romero (El Salvador),...
Este Movimiento fue condenado por la Iglesia Católica al no ser " sus orígenes marxistas compatibles con el Evangelio". Juan Pablo II solicitó un estudio sobre el mismo en 1986 a la Congregación para la Doctrina de la Fe ( antiguo Santo Oficio). El Prefecto de dicha Congregación era por entonces el Cardenal Ratzinger (posteriormente Benedicto XVI. La Teología de la Liberación ( en adelante TL) surgió con el objetivo de dar respuesta a algunos interrogantes surgidas en el seno de algunos sectores de la Iglesia: Cómo ser cristiano en un continente oprimido y cómo conseguir que la Fe no fuese alienante sino liberadora del pueblo. En sus principios destacaban ideas llenas de compromiso: Una opción preferencial por los pobres, eliminar la explotación, la liberación como toma de conciencia, la pobreza entendida como pecado social. Y añadían dos reflexiones fundamentales: la salvación cristiana no puede darse sin la liberación económica, política, social e ideológica, así como que no solo hay pecadores sino que hay víctimas del pecado que necesitan justicia.
Diríamos que la TL emanaba de una conciencia de compromiso y trabajo con y por los pobres y de horror frente a la pobreza y la injusticia.
Aquí en España, con una Iglesia oficial anclada históricamente a los poderes más reaccionarios, aparecieron también movimientos ligados a la TL, destacando ya en las décadas de los sesenta y setenta del siglo pasado, el surgimiento de los llamados " curas obreros" y colectivos de sacerdotes y seglares en lucha abierta y decidida contra el Franquismo bajo los aires conciliares de renovación.
http://www.publico.es/450424/los-curas-contra-franco
El 1 de Abril de 1939, Pio XII envió un telegrama al Dictador: "Agradecemos la deseada victoria católica, hacemos votos porque este queridísimo país emprenda con vigor sus antiguas tradiciones cristianas". Centenares de sacerdotes osaron plantar cara al régimen y a la posición de la jerarquía en las décadas a las que me he referido. La lucha de estos curas obreros fue silenciada y reprimida en su momento histórico. Ahora, además, ha sido olvidada por la Iglesia. Entre 1973 y 1976 ciento veinte sacerdotes fueron encarcelados. Laa cárcel concordatoria de Zamora funcionó entre 1968 y 1976 para sacerdotes y religiosos condenados por delitos políticos y sindicales.
Muchos de ellos abandonaron posteriormente el sacerdocio, trás ser amonestados, reprendidos e incluso condenados por tribunales eclesiásticos y/o civiles. Nunca entendí y sigo sin entender, cómo estos movimientos religiosos se mantienen aún en Comunión con la Iglesia oficial, de la que tantísimo les separa. Fue siempre para mi, objeto de polémica y debate desde los años setenta con personas a las que por otra parte les profeso un gran respeto y en algunos casos auténtica admiración.
Quiero citar aqui a un pequeño grupo , referentes y abanderados de esta lucha:- Leonardo Boff, mencionado ya anteriormente.
- Jon Sobrino: (Barcelona, 1938). Jesuíta. Colaborador de Óscar Romero ( asesinado en 1980). Escapó del atentado sufrido en la UCA de El salvador, donde murieron seis compañeros suyos. Amonestado Por la Congregación para la Doctrina de la Fe en 2006. Tiene prohibido impartir enseñanza en instituciones católicas.
- Francisco García Salve: (Zaragoza, 1930). Jesuíta. Miembro del PCE y de CCOO. Condenado en el Proceso 1001 (1973) por el Tribunal de Orden Público. Dejó la Orden en 1976.
- José María Díez Alegría: ( 1911- 2010). Exjesuíta. Teólogo. Vivió en el Pozo del Tío Raimundo junto al P. Llanos. Obligado por el Vaticano a abandonar la Orden aunque fue acogido siempre por los jesuítas hasta su muerte.
- Pedro Casaldáliga: ( Barcelona , 1918). Religioso y escritor. Desde 1968 en Mato Grosso (Brasil), de donde nunca volvió. Ordenado Obispo en 1971. Amonestado por el vaticano en 1988. Líder de la TL. http://ccaa.elpais.com/ccaa/2012/12/08/catalunya/1354981279_503689.html.
- Hélder Cámara: ( 1909-1999). Obispo y miembro relevante de la TL.- Enrique Miret Magdalena: (1914- 2009)- Zaragoza. Teólogo seglar. Aparte de su compromiso y de su obra, destacaron sus articulos semanales en la Revista Triunfo y que tantas luces encendieron.
- Óscar Romero: (El Salvador. 1917-1980). Arzobispo. Asesinado por su ministerio pastoral.
- José María de LLanos (Madrid, 1906- 1992). Jesuíta. Cura Obrero. Vivió en el Pozo del Tío Raimundo desde 1955. Militante activo.
- Ignacio Ellacuría: (Portugalete, 1930- 1989). Jesuíta, filósofo y teólogo español, asesinado el 16 de noviembre de 1989 por militares salvadoreños junto a otros cinco compañeros y un miembro del personal de servivio junto a su hija. Profesor de la Universidad Centroamericana de El Salvador.
Miembro activo de la TL.
- Ernesto Cardenal: (Nicaragua, 1925). Poeta, sacerdote, teólogo y político. Increpado severamente en 1983 por el Papa Juan Pablo II , a pie de avión durante su visita a Nicaragua. - Silva Henríquez: (Chileno, 1907- 1999). Salesiano y Arzobispo de Santiago. Acérrimo defensor de los DDHH durante la dictadura de Pinochet.
- Cito también a algunos de los llamados curas obreros, a partir de 1964: David Armentier, Pedro Solabarría, Mariano Gamo (Tuvo serios problemas como tantos otros durante el Estado de Excepción anunciado por el ministro de Información Manuel Fraga , quien según sus propias palabras, "trataba de luchar contra las acciones minoritarias sistemáticamente dirigidas a alterar la paz española y a arrastrar a la juventud a una orgía de nihilismo y anarquía". Este Estado de Excepción ( el octavo de la dictadura) se declaró en todo el territorio nacional en enero de 1969.
- Lluís María Xirinacs (Barcelona, 1932- 2007). Político, Escritor y Religioso. Senador durante la Transición. Combatió la vinculación Iglesia- Estado con una larga huelga de hambre. En Carabanchel en dos ocasiones.
- José Antonio Casasola (Franciscano de Sevilla).- Alfonso Carlos Comín: ( 1933- 1980): su vida fue un compromiso político, social y religioso.
Obviamente la lista sería interminable. Tan solo he citado en esta entrada a personas relevantes con las que de alguna manera (ya fuese por amistades comunes en algún caso, asistencia a actos o charlas y sobre todo a la lectura de algunos de sus libros) me sentí más identificado en su momento.
2 comentarios:
... Son todos los que están, y la lista podría completarse con otros nombres que nos hablan de otra iglesia bien distinta. Recuerdo ahora a uno de los curas obreros por excelencia, al jornalero y sacerdote DIAMANTINO GARCÍA, por ejemplo...
Felicidades por los dos artículos, atan completos y tan claritos.
Gracias compañero. Se me escapó Diamantino García, sí. Su temprana muerte no le restó la estela de compromiso personal que nos dejó, sobre todo como cofundador del Sindicato Obrero del Campo (SOC).Gracias de nuevo por rescatarlo. (JAEM)
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