Ecclesia Catholica Romana (I)

( Es la Iglesia Cristiana más numerosa. Ella misma se declara fundada por Cristo).

* De aquellos polvos, estos prelados.

Monseñor Reig Plá (1947) es Obispo de Alcalá de Henares. Desde 1999 preside la Subcomisión Episcopal para la Familia y Defensa de la Vida. Vicepresidente del Pontificio Instituto Juan Pablo II para Estudios sobre el Matrimonio y la familia.

Este Monseñor se permite hacer declaraciones dirigidas a la sociedad civil en su conjunto con la inequívoca intención de influir en las decisiones legislativas del Gobierno de la nación y del Parlamento desde  " su  verdad incuestionable" para creyentes y... no creyentes.

ElPais.es (17 de abril) recogía algunas declaraciones de Monseñor Reig : " El aborto es una conjura internacional para reducir la población. Detrás de esta conjura están los sindicatos, partidos políticos y medios de comunicación".

(A Reig Plá de poco le sirven las estadísticas: la población mundial hace dos siglos era de unos mil millones, hace un siglo era de  unos mil setecientos millones y en la actualidad rondamos los siete mil millones). Podemos seguir leyendo en la misma información : " la ideología en los colegios está relacionada con la homosexualidad". En Público.es (13 de Abril) leemos otras declaraciones de Monseñor: " Estamos ante una verdadera sociedad enferma y una cultura de la muerte, desde que se aprobaron las primeras leyes del divorcio y despenalizadoras del aborto". " Los marxistas son los culpables de destruir el sentido de la sociedad ". Plural.com  recogía en su edición del 10 de Abril : " Las ideologías introducidas en los colegios hacen a los niños homosexuales". Ya en 2010 había asegurado que " las parejas de hecho estaban más inclinadas hacia la violencia  de género que los matrimonios católicos". El año anterior ofició una misa por los Caídos en Paracuellos ( entiéndase por los caídos del bando sublevado), en la que se lució una bandera preconstitucional.

Otro prelado con gran poder es Monseñor Rouco Varela ( 1936). Nada menos que Presidente de la Conferencia Episcopal Española.  Cardenal y miembro de la Real Academia de Doctores de España.

Diario. es  en su edición de 15 de abril recogía algunas declaraciones como: " No es fácil entender que todavía no se cuente ni siquiera con un anteproyecto de Ley que permita una protección eficaz del derecho a la vida de aquellos seres humanos inocentes". " Es urgente la reforma en profundidad de la legislación vigente. Además de las medidas judiciales se debe proteger  la maternidad y el fomento de la natalidad". " Es urgente, igualmente, la reforma sobre el matrimonio para recuperar una definición que no ignore la especificidad del matrimonmio entre hombre y mujer".
Ante este tipo de declaraciones, el Estado, a través de sus distintos órganos representativos, calla. Nada que decir. Nada que situar en su sitio. Nada que solicite explicaciones.

No son declaraciones de párrocos de aldeas perdidas en sus misas dominicales ni de colectivos sociales  o asociaciones carentes de peso. Son declaraciones de altos dignatarios de la Iglesia Católica Española con gran influencia - aunque no lo parezca - y, sobre todo, con un gran poder. Es la Iglesia oficial exigiendo leyes para toda la sociedad civil cuando todo debería quedar reducido a  unas normas o leyes de carácter interno para  sus propios fieles. Parece ser que evangelizar- haciendo uso de sus propios conceptos - equivale a legislar. Es lo de siempre a lo largo de siglos desde el Edicto de Milán (313 d.c.). Ese intento de  legislación para todos y sostenido en el tiempo ha llevado a la Iglesia a extremos como la creación del Tribunal del Santo Oficio (1478). El dominico Torquemada, confesor de Isabel la Católica fue el primer Inquisidor General de Castilla y Aragón. La Inquisición, vigente a lo largo de tres siglos y medio fue una " vigilancia religiosa sobre la vida de cada individuo con responsabilidad plena desde los 12 años ( niños) y 14 años ( niñas)".

Nunca se escucha nada a  los Monseñores, y menos a sus órganos colegiados, definirse sobre otros temas de gran calado en nuestra sociedad : por ejemplo sobre " los niños robados" desde comienzo de la Dictadura hasta bien entrada la Democracia con posible implicación de miembros de congregaciones religiosas. Pronunciarse, por ejemplo, sobre los desahuciados, sobre el paro, sobre la pobreza galopante, sobre la exclusión social, la Sanidad y la Educación Pública cuestionadas, la corrupción política, la conciliación laboral en el trabajo, el liberalismo,  la pederastia en sus filas...Pronunciarse con la misma solemnidad, presión y "denuncia evangélica" con la misma contundencia que utilizan en  temas para ellos innegociables. 

No quieren perder ni un milímetro - ni uno solo- de poder, de poder terrenal. El Franquismo les ofreció el Concordato ( 1953), sin olvidar su bendición y apoyo activo a lo que ellos llamaron La Cruzada (Guerra Civil). Fueron Procuradores en Cortes por designación directa, no habia publicación sin su "nihil obstat" , pasearon a Franco bajo palio, asumieron que el dictador presentase al Vaticano las ternas de obispos para su nombramiento, censuraron el cine, los libros, implantaron costumbres sociales, otorgaban certificados de buena conducta hasta finales del Franquismo para  algunos puestos laborales ( por ejemplo funcionarios de la enseñanza), continúan, aún, elevando a los altares a los llamados " mártires de la Cruzada", sus templos y catedrales son cementerios selectos para personas pertenecientes a la alta sociedad de cada momento, o de personajes que un día atentaron contra la democracia ( Valle de los Caídos, Basílica de la Macarena, ....), callaron la tarde-noche del 23 F,...
Aliados, como Institución,  hasta el final de la Dictadura cuando otro Monseñor, Cantero Cuadrado, ejerció la Jefatura del Estado junto al Presidente de las Cortes y el Teniente General  en activo y de mayor antigüedad, entre el 20 y el 22 de noviembre de 1975, así como en otra ocasión en 1976, trás ausentarse el Rey por una visita a Santo Domingo y EEUU. El poder, siempre el ansiado poder terrenal .

Conviene recordar que el Concordato de 1953 sigue vigente, hoy día , casi en su totalidad aunque parezca increible. Se modificaron cuatro acuerdos que fueron firmados estratégicamente el 3 de enero de 1979, una semana después de entrar en vigor la Constitución ( 29. 12. 78), para dar apariencia constitucional a un acuerdo preconstitucional. Fue otro aspecto de la Transición - la cuestión religiosa -  asumido y silenciado por los organizadores/ protagonistas de la misma.

Ahora, en pleno 2013, se mantienen los conciertos religiosos, la exención del IBI, el mantenimiento de aquel Concordato, la financiación directa de la Iglesia, la permisividad con inmuebles etc, la asignatura de Religión evaluable con profesores nombrados por ellos y pagados por el Estado, la exclusión de la asignatura "Educación para la Ciudadanía" (triunfo suyo también ), etc....sin olvidarnos de su exclusión de los tijeretazos que está sufriendo la sociedad en su conjunto y especialmente los más desfavorecidos.
 Todo al alza, todo a más, a mucho más, a pesar de los años transcurridos, a pesar de los partidos gobernantes (PSOE y PP) doblegados y entregados a fondo con independencia de su teórica ideología (PSOE). Ahora que no gobiernan hablan de denunciar el Concordato. Como si en 22 años de gobierno no les hubiese dado tiempo. O entonces, es que " no tocaba"? ¿Se puede dudar todavía del inmenso poder e influencia de la Iglesia Católica en un Estado que constitucionalmente se define como laico? 

Siempre insaciables  y siempre con la estrategia de sentirse perseguidos y acosados. Su lema, parece ser: "evangelizar es legislar para todos, quieran o no , sin concesiones. Per Secula Seculorum". Piensan que la sociedad les pertenece. Como si el ayer, el hoy y el mañana fuesen exclusivamnete suyos. Su reino, en contra de sus preceptos, sí es de este mundo.