Con el paso de los años, después de haberse asentado en nuestro país el proceso democrático, han ido apareciendo numerosos casos de corrupción de nuestros representantes políticos independientemente del partido al que pertenecen.
En los últimos meses y sobre todo en los últimos días los casos de corrupción, prevaricación y cohecho aparecen por doquier.
Ante estas circunstancias, en cualquier sociedad mínimante sana y consecuente con los principios democráticos, se exigiría el inmediato cese de esta "pandilla" de "mangantes" y por supuesto la dimisión de sus responsables políticos.
Pero " Spain is different". Aquí no hay la mínima movilización ciudadana exigiendo a nuestros partidos políticos y a sus dirigentes un poco de honradez y dignidad. Al revés de lo que cabría esperar, la mayoría de estos "tipos" se ven refrendados en sus puestos y apoyados por sus propios partidos, permaneciendo impunes pase lo que pase.
Incluso estos personajes en las próximas elecciones serán votados aún más por los ciudadanos.Aquí no ha pasado nada .Todo vale.
O somos estúpidos o estamos ya tan acostumbrados a esta situación, que nada nos parece importante para movilizarnos en defensa de unos principios morales exigibles para quién se supone está en la política para servir a los ciudadanos que les han votado.
Si seguimos con este "aletargamiento" seguiremos con esta cara de tonto que se nos queda tras conocer un nuevo caso.
Está claro : Tenemos lo que nos merecemos
1 comentario:
Esa frase, que se repite últimamente por doquier, terminará por cuajar, pero pienso que no es cierto... no somos tan malos... ni tan catetos.
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